martes, 25 de mayo de 2010

Huitzilopochtli en defensa de Coatlicue

Dice la más perfecta de sus predicciones que la Tierra fue decapitada por sus propios hijos. Ataviados para la guerra marcharon contra ella, todos menos el picaflor, quien comunicó a uno de los hijos de su seno los planes de los humanos que se consideraban superiores. Ella tuvo miedo, sin embargo ese hijo le habló desde el vientre materno y le dijo que él cuidaría de ella.
Cuando ellos llegaron para matarla, nació Huitzilopochtli ya armado para el combate y con el rostro pintado para la guerra.

La de la falda de serpientes

Ella da la tierra y el fuego, la vida y la muerte; receptáculo de la energía del Sol, escenario de la guerra; regulada por la Luna y las estrellas de los cielos, Madre del género humano.

Sus atributos: está decapitadam de modo que no ve ni oye, ni piensa, ni habla. En lugar de su cabeza lo ocupan las serpientes con sus cascabeles; tiene los pechos colgantes de tanto sustentar; el collar de corazones y manos amputadas es símbolo de su avidez por los sacrificios humanos; recibe a los muertos y los devuelve a la vida. Sostiene dos serpientes de fuego que representan la pasión que infunde a sus hijos; está embarazada y sus pies tienen forma de garras.

miércoles, 5 de mayo de 2010

Kolams, Alpana, Rangoli, Chowkpurna, Hase, Muggulu

La Belleza propicia el Bien.

En petroglifos, cerámica, trabajos en oro y jade, textiles, basamentos, acueductos, miles de kilómetros de calzadas, complejos habitacionales, tronos de piedra, esferas monumentales y estatuaria en general se ven plasmados los elementos geométricos del paralelismo, ángulos rectos, triángulos rectángulos, isósceles y equiláteros, círculos concéntricos, figuras planas inscritas en discos, prismas, cilindros, esferas y más. Son fiel reflejo del manejo de conceptos matemáticos indígenas en un grado más allá de lo elemental.